Pero todo tiene un motivo, lector nuestro de cada día (sí, tú, no sé si sabes que estás solo... pero te queremos), el motivo de la firmante que soy yo y que en un alarde de originalidad me denominaré primera parte contratante es que fue a la sala de urgencias del hospital y se llevó la oferta "pague una enfermedad y llévese tres"... aviso a navegantes: no adentrarse con fuerte marejada. Aviso a no navegantes: leed bien las ofertas que a veces abusan de la publicidad engañosa.
El motivo del no firmante al que en un alarde de originalidad sin precedente alguno llamaré segunda parte contratante es que se debe a su oficio, y para los que no lo conozcan diré que es un aplicado muchachuelo de 16 años muy estudioso que tiene ahora la primera evaluación de diciembre y es sabido que hay que empezar currándoselo para luego no hacer nada el resto del curso... (¡¿qué pasa?! He dicho "para los que no lo conozcan").
Así que hoy me tomado el café, me he bebido mi zumo y me he dicho, voy a actualizar algún blog, y dicho y hecho, ¿para qué quiere una un blog cajón de sastre si no es para poder decir absurdeces cómo ésta sin dar explicaciones? Ya lo dijo el Ibarretxe ¿de qué sirve ser lehendakari si no puedo convocar un referéndum cuando me salga de las papeletas y papeletos?
Ozkaritz: Cierto es, pero vivo sin vivir en mí ni estudiar en mi casa sino en la biblioteca... precisamente allí...en la biblioteca.
Y veo, dentro del análisis metabloguístico de Sometimes, que también ha cogido el concepto de blog cajón desastre: el blog es mío y doy las explicaciones que me dé la gana.
Ya lo dijo Ozkaritz:
¿De qué me sirve ser vasco si no puedo convocar un lehendakari cuando me salga de los cascoporras y cascoporros?
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